Rafael, Clara, Pedro y Mariana.

16/17.08.08

VIVAC 2:  ESCORCA – TORRENTE PARÉIS – CALOBRA

Lo dicho anteriormente, entre el “paripé” de Clara con el problema del coche, que al final no encontré nada, pero algo debía de tener… Baja a la Calobra, deja un vehículo y los cuatro chafaditos en el “huevito Kia” de Pedro. Rectifico, los que íbamos detrás, con las mochilas, la bandeja del maletero, íbamos chafaditos. Llegamos a Escorca y nos componemos. Empezamos el pateo bajando por zona cárstica y árida,  casi a oscuras. El descenso al torrente es sobre las 20:30h, llegando sin luz una hora más tarde.

  Impresionante cañón. Gracias a la Luna se aprecian las altas y salvajes paredes verticales, brillando por su reflejo. Como es tarde para llegar a s´Entreforc, nos ponemos lo más cómodo posible en el lecho del torrente, entre piedras de múltiples tamaños, cantos rodados y otros no tanto. Era más cómodo el hormigón de Sa Costera

Sacamos y cenamos de lo que ha comprado Clara, afortunadamente, me queda la ensalada de arroz de ayer, que si no, pasaría más hambre que un muerto con estas mujeres.

La espectacularidad de mirar al cielo, el silencio en nuestro entorno, interrumpido por el paso de unas cabras…nos hace regodearnos del momento. La discusión, otra noche, de por dónde saldrá la Luna, lunera… es el tema final, antes de dormirnos.

Pero, sobre las 00:35, percibo una luz brillante allá en lo alto sobre el perfil de la montaña…Clara y  Mariana, comentan que hay eclipse, yo  dudo, ya que no había escuchado nada, pero en el transcurrir de la noche, veo que a esa Luna, le falta un trocito. Saco la cámara y hago unas fotos, para ver lo que sale. Y de recuerdo. Efectivamente era un eclipse.

Suelo incómodo de verdad, no pego ojo. Al amanecer nos levantamos hechos polvo, pero contentos por lo que nos espera. Queremos madrugar (Clara es la responsable del avituallamiento, yo de cumplir con el horario)  para evitar otros excursionistas, pero sorpresa…. Son las 7:30h y ya están bajando de Escorca un grupo numeroso de excursionistas o domingueros, lo digo por las prendas. Y por si fuera poco, nos pareció anoche escuchar voces más adelante, otros que también optaron por dormir en el Torrente. Debemos desayunar rapiditos, para evitar embozos y el calor.

 Ni una cosa ni la otra. Salimos diez minutos pasadas las 8h, (he de poner en vereda a ésta gente) Empezando propiamente dicho el descenso por las inmensas y  lisas-resbaladizas rocas, nos encontramos de pronto en medio del “ Paseo-del-Born-en-día.comercial”. Y para colmo ya estamos sudando como  “gorrinillo en el horno”. Hay que esperar… y no desesperar. La señorita Clara está un poco “pez”, afortunadamente está bien acompañada y protegida. La espera beneficia para hacer una fotos, el problema es que me quedaré sin batería dentro de no mucho, pero suficiente para un recuerdo.

Saltando, arrastrando, sudando, bebiendo, descansando, hablando, riendo y volviendo a sudar y con el “Paseo-del-Borne-en-día-comercial”, avanzamos y sin darnos cuenta, pasan tres horitas… que de pronto el inmenso cañón se ensancha para dejar ver un magnífico paisaje (donde se han filmado películas, como la tan famosa  “Simbad, el Marino”), Paredes encrespadas y bañadas por el mar mediterráneo, con su impresionante mar cristalino.

Rápidos nos acercamos a la costa, dejamos las mochilas y al agua “patos”. Dioooosss qué placer!!!!!. Se acabó sentirse sudado y el sopor de un calor infernal. Chapoteamos y tomamos el sol. AAaahhh esto se está llenando de gente (no diré nada de; extranjeros o “guiris”, que no está de moda dicen, claro con eso de “Ciudadano del Mundo”). Como Pedrito ha de estar en Palma para comer, si no  quiere que le “caneen”, sobre las 13h nos vamos.

  Mi Clara con las prisas de llegar al coche acelera el paso y nos deja solos en la cala, pero que prisa!!! Claro que Clara, no sería Clara si no llega tarde o bien se le olvidan las cosas…. Si no le recojo las zapatillas,,,,, contenta se pone cuando nos unimos a ella en el vehículo.

Rezamos para que su super-coche, no se nos ponga tonto y le de por calentarse, que para eso ya vamos nosotros, je je…

 Estamos cansaditos, acalorados y con sueño y otra vez chafaditos en el coche de Clara hasta subir a Escorca en busca del otro coche.

Aquí nos separamos; los hombres en uno y las mujeres en otro. Como no me he enterado de nada estos días, supongo que el vehículo de Clara, se comportó bien. 

Llego a casa y me preparo algo que picar, son cerca de las 15h, qué bien, a descansar un poco, no quiero hacer nada de nada, Suena el móvil, Rrriinng, rrriiiing. Es Nuria, -Algo de playita?  Salí de nuevo y …. Total que volví tardísimo,casi de madrugada, pero eso… eso es otra historia…

Lo que sí sé, es que fueron tres días intensísimos, de mucho ejercicio, calor, sudor,  sensaciones y emociones indescriptibles, gracias a éstos amigos míos: Pedro, Mariana y Clara, y rodeado de la Naturaleza más salvaje de Mallorca y más bella.

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