Después de pasarme toda la mañana buscando unas cavidades por la zona de Galilea, otra vez, doy por sentado que las coordenadas de las mismas no son correctas. Ya me pasó con otra cavidad  y apareció en otra loma, que afortunadamente encontré sin problemas.

Algo positivo de todo esto es que encuentro una cavidad sin catalogar, pendiente de hacer la topografía. No es nada alta, una gran roca defiende la entrada, el suelo está lleno de carrarringos de cabra, me voy adentrando unos metros, otra piedra por en medio, en el momento que la paso me recibe un esqueleto de cabra, no parece que tenga nada roto, lo más seguro que por vejez se hubiera ocultado en lo más hondo de la cueva para poder morir en paz, no es la primera vez que lo veo.

Aprovecho y llego a Calviá, me voy a buscar la Cova Son Font, que está en la urbanización de Son Font.

Nada más tomar la calle hacia la urbanización, hay un momento que llego a una explanada que es un cruce, a mi derecha está la c/ Sa Cova, por lo que aparco el coche y ando una decena de metros, al lado izquierdo de la calle está la cavidad.

Tiene dos bocas, al entrar por la más baja veo unos sacos de obras y ramas que algún desaprensivo a tirado, pero no bloquea el paso. No es muy grande, su profundidad máxima es -14 m con un desnivel medio de  -30º. Casi toda ella, en un lado de la cavidad, está dominada por un gran colada que empieza desde arriba y casi llega hasta el fondo, en otro lado, a la altura de la boca, hay una columnata, el resto del suelo está plagada de piedras, vemos el techo con algunas formaciones interesantes y «supuestamente»  unas estalactitas serradas como recuerdo.

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