Vista de Bilbao y del albergue Aterpetxea
05 junio 2009 (viernes)
PALMA DE MALLORCA – BILBAO
Bilbao me recibe con lluvia y frío. Qué contraste de hace unas horas, en Mallorca a las 6h, hacía un tiempo hermoso y prometía día soleado. Ahora aquí es todo lo contrario. Sin mucha demora, me bajo del autocar en la plaza Moyua y tomo el metro hacia Etxebarri, de ahí a pie, diez minutos, al polígono. Y bajo lluvia, en la empresa de transportes, rajo la caja y saco la bicicleta y las alforjas con lo necesario para el periplo que me impongo este año; La Ruta Norte del Camino de Santiago, peregrinación.
Todo está correcto, monto los pedales, las alforjas, ajusto la dirección y por último me cambio de ropa. Y listo emprendo el pedaleo, la lluvia es persistente. Tomo metro hasta Bilbao. Aquí, todo es atasco, ruidos de pitidos, claxóns sonando sin parar. La contaminación acústica es infernal. Muchos viandantes se tapan los oídos cuando una ambulancia y un coche policial van con las sirenas, ¡una calle antes de pasar por su lado!
Por el tiempo revuelto decido pasear por la ciudad y conocerla un poco más. El tiempo mejora ligeramente. Museo Guggenheim, Museo de Bellas Artes, Basílica de Begoña, Iglesia de los Santos Juanes, Iglesia San Nicolás, palacio de Congresos y de la Música, Hospital Civil de Basurto, Campo de fútbol San Mamés, etc…
Ya no llueve, pero nubes siguen ahí. Me dirijo al Albergue Aterpetxea, a la salida de Bilbao, dirección Baracaldo. Todo en obras, lo que dificulta encontrarlo. Pregunto a la gente y. así, poco a poco, consigo localizarlo y llego a tiempo… a tiempo de que no me vuelva a llover encima.
Mi primer sello en la credencial. Un poco tarde para emprender la peregrinación, así que, me quedo aquí. Me instalo en la habitación, compartida con otros tres. Repaso lo que llevo y la bicicleta. Paseo por la Ciudad, cena y a dormir. Mañana a las 7h, a levantarse y a disfrutar.
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